La única cosa que mantiene alejado a Billy Baston de la chica de sus sueños es una pequeña goma o más bien la falta de una. Por suerte, Billy, encuentra una en un motel de carretera. Pero la suerte es fugaz y cuando Billy vuelve rápidamente al Campus universitario, muere en una colisión frontal con un camión. Ni siquiera la muerte puede frenar a un tozudo como Billy una vez que se fija una meta y cuando vuelve a la escuela como espíritu su primera parada es el vestuario de las chicas, !y eso no es más que el principio!. Hay un fantasma suelto y hay que cazarlo.